domingo, 20 de diciembre de 2020

 CUARTO DOMINGO DE ADVIENTO




Este domingo la Palabra viene a prepararnos para recibir a Jesús, ¡ que nace ya!.


Le gritamos al Señor desde el corazón: 

"VEN    SEÑOR".

Tenemos que presentarle la necesidad:

¿¿¿Qué tengo yo hoy que necesito que el Señor venga a mi vida este día ???




Dios nombra a su siervo David, rey y él tiene un plan y Dios le da otro.

El Señor envía al profeta Natán a David y le habla al corazón:

David tiene una misión, Dios lo ha elegido del último de sus hermanos.

Dios le hace capaz de vencer a todos sus enemigos.... 

 Dios hace de él algo grande:

De ti suscitará una descendencia: el Mesías. 

Tu trono durará para siempre.

Y David cantará:

Cantaré eternamente tus misericordias Señor.

Cantaré eternamente tu misericordia, anunciaré tu fidelidad por todas las edades.



Para cada uno de nosotros tiene Dios un plan: o nosotros o Dios. Si el no construye la casa en vano se cansan los constructores.

Por eso Dios, nos cuestiona hoy: ¿¿¿ Donde vas ??? 

El que construye la casa soy Yo. El que hace todo nuevo soy Yo.


Dios es el único sabio que sabe construir nuestra vida.

Por eso nuestro modelo para ser cristianos está en la Virgen María.

Lo primero que le dice el ángel es: Alégrate, llena de gracia el Señor está contigo.


En medio de un mundo de tinieblas, de dudas, de miedos, de sabiondos, de la sabiduría de este mundo, el ángel la saluda a ella llena de gracia, llena de Dios, donde Dios puede entrar.

Por eso estamos llamados a vivir llenos de Dios no de nosotros, a  vivir en la voluntad de Dios.



El SI de María, es obra de Dios.

He aquí la esclava del Señor. Hágase en mi según tu Palabra.

Se hará lo que Dios quiera, es capaz de decir María, que nosotros seamos capaces de decir lo mismo, que se haga lo que Dios quiera y pueda nacer dentro de nosotros esta Navidad.



Jesús también nos va a enseñar a vivir después en la voluntad de Dios. 


También vamos a tener nuestro ángel que nos lleve a Dios y nos de una Palabra. Y  nos irá muy bien si obedecemos a la Palabra de Dios.

Si respondemos:  Hágase tu voluntad.

Señor te necesito. Que en nuestra vida se haga Navidad.

                                   







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